casa A | tandil - argentina | 2021









Ubicada en el centro sudeste de la Provincia de Buenos Aires y al pie de uno de los sistemas serranos más antiguos del mundo, Tandil. Este territorio logra conjugar de manera correcta su hermoso entorno natural con una ciudad de mediana escala, en continuo crecimiento. Se encuentra a 360 Km de la Capital Federal, y entre 150 y 200 Km de la costa Bonaerense, convirtiéndose así en un punto turístico importante en la Provincia.
La vivienda en cuestión se encuentra implantada en un barrio cerrado, situado a 15 km del centro de la ciudad, induce a aislarse completamente de la vida urbana y adentrarse en un paisaje de sierras, arboledas y tranquilidad. Se trata de una vivienda de uso semi-permanente, en donde la aspiración de los comitentes era lograr un ambiente de relajación, vida al aire libre y ocio con familiares y amigos; esa fue la premisa de la Casa A en las Sierras: EL ENCUENTRO. Entonces, el programa requerido por los comitentes era muy claro: un gran espacio que desdibuje los límites con el exterior, y que según la estación del año pueda albergar tanto al núcleo familiar y amigos… La casa debía convertirse y adaptarse para cada necesidad, y el paisaje volverse parte de ella. Como respuesta a estas necesidades, y con la intención de fusionar lo más posible el exterior con el interior, el proyecto se desarrolla en una planta rectangular, estructurada por tres módulos distintos ordenadores, que albergan los diversos usos. La casa se implanta en un lote en esquina, de geometría irregular, que cuenta con la enorme virtud de tener en la orientación norte, la mejor vista: el pie de las sierras, una pequeña capilla y un centenar de distintas vegetaciones, que regalan una pluralidad de colores en cada estación del año. Teniendo en cuenta estos importantes elementos, la casa se “apoya” linealmente sobre los límites del frente del lote, cerrándose hacia la calle y la orientación más desfavorable, ubicando allí los servicios, circulaciones y accesos, generando una mayor superficie libre de patio, de manera que la casa se abra hacia ese vacío, abrazando el paisaje. Se genera así en cada ambiente una relación directa con el exterior, adaptándose a la escala de cada necesidad. Se propone una cocina lineal de borde enfrentada al paisaje, un núcleo húmedo y un dormitorio, como así también cochera semicubierta y piscina. El sector semicubierto de parrilla se vuelve el corazón de la casa, el punto principal de encuentro social y con el paisaje.
La vivienda logra una máxima permeabilidad hacia el exterior gracias a la estructura independiente de hormigón armado y columnas metálicas, que redujeron al máximo la necesidad de elementos verticales que obstruyeran las vistas.
La materialidad de la casa se resuelve a partir de la estructura de hormigón armado, contenedora de los espacios abiertos y cerrados; carpinterías de aluminio con DVH de piso a techo y un único solado que unifica las partes y acentúa la continuidad espacial y la relación interior-exterior. El objetivo principal de encuentro social y paisaje ya lleva dos veranos a todo ritmo.
Proyecto y Direccion: Arquitectas Eugenia Guadagna y Julia Inclan.